Файл:Ice Age Temperature.png


Las dos primeras curvas muestran los cambios locales de temperatura en dos lugares de la Antártida, derivados de las mediciones isotópicas de deuterio (δD) en núcleos de hielo (EPICA Community Members 2004, Petit et al. 1999). El último gráfico muestra una reconstrucción del volumen global de hielo a partir de mediciones de δ18O en foraminíferos bentónicos de un compuesto de núcleos de sedimentos distribuidos por todo el mundo, y está escalado para ajustarse a la escala de las fluctuaciones de la temperatura antártica (Lisiecki y Raymo 2005). Nótese que los cambios en el volumen de hielo global y los cambios en la temperatura antártica están muy correlacionados, por lo que uno es una buena estimación del otro, aunque las diferencias en el registro de sedimentos no reflejan necesariamente las diferencias en la paleotemperatura. Las líneas horizontales indican las temperaturas modernas y el volumen de hielo. Sin embargo, dado que los registros geológicos, como los núcleos de hielo y los sedimentos, representan una media a menudo a escala de miles de años, la comparación directa con los valores actuales puede ser engañosa. Las grandes variaciones a corto plazo del clima antiguo no están presentes en los registros fósiles. Por lo tanto, la comparación no es similar y es científicamente inválida. Las diferencias en la alineación de los distintos rasgos reflejan la incertidumbre de la datación y no indican una cronología diferente en los distintos lugares.

This figure was produced by Robert A. Rohde from publicly available data and is incorporated into the Global Warming Art project.